Reflexion pseudo Filsofica del Personaje en A1.

La Edad Oscura:
(Durante un periodo de un mes el paciente experimento una serie de jaquecas y una extraña fobia a la luz lo que hizo que estuviera debajo de su propia cama por días. Esto es parte del delirio o alucinación del mes de octubre de 2011)

Como oficiante de un culto desaparecido otra vez soy yo, el que se disecciona en miles de partes, miles para verme. Con astucia de carnicero viejo, veo mi carne. La crónica de una narración vital que solo busca excusas para crear lo que no tiene. El escritor es ante todo un hombre creador, auque sea de blasfemias. No importa, cuanto se pueda dudar en este punto. Lo importante es que pese a todo no se dude. La determinación es lo que hace al texto, no la vida del sujeto que la escribe que puede y tiene tal vez que estar plagada de desgracias, mediocridades y manchas en los pantalones por causas diversas.
La verdad siempre es más cruel en manos de los amigos, de los enemigos es como un halago una justificación para odiarlos más. Todo esto ocurre siempre, en mis depresiones encuentro un árbol frondoso de historias. Por lo que toda la miseria esta hecha letras, miles de letras, une ejecito dispuesto a plasmar las miserias de mí su autor. Por eso soy pedante, injusto, verborragico y tarado.
Toda la vida de cocina de manchas de envejecimiento ves como la vida se te va por el caño, no tenes dudas. Ves los mismos azulejos, todo te dice que tu vida es un no retorno. Es la crueldad básica de todo edificio, lo único que me une algo. Porque en verdad cuando pienso en que voy a terminar mejor morirse ¿no?
Soy el príncipe de la queja, es un amor apasionado hacia esa nada, que nada te deja hacer. Siempre me siento en ninguna parte, mi venganza contra la vida es esta escribir algo. Buscar ser molesto como un gusano en un cuerpo hinchado por la putrefacción. Ya no me importan muchas cosas, entonces las letras son libres.
Vendería mi paganismo del siglo XXI, pero eso no es productivo. Por eso, siempre espero que alguno de mis Rogelios o Tiberios, personajes que hice tomen vida.
Mi vida le falta la violencia de la Tiberio y la variedad de la de Rogelio. Yo solo soy un hombre solo, y quizás este con la mente podrida o no.
Siempre en momentos de depresión existencial profunda pienso en los años 50´ cosa que me gusta hacer, pensar en épocas remotas, lejanas que sean absurdas para todos menos para mí. Yo solo hago esto para escapar a la rutina, alguna vez me dijeron que la vida se disfrutaba, no se pensaba pero yo no vivo mucho. Solo lo suficiente, maldita la gente que se cree sus ficciones, por que les quita la mitad de su valor. Tal cual las manos sucias que sueñan con mil faldas que aún no conocen. Por eso hay que vivir con poco, no se crean que valen mucho. Con suerte, tengan dinero gástenlo bien, sean hedonistas gourmet.
Por que yo soy hedonista frustrado pero hedonista al fin.- lo demás es decadencia. Siendo decadente desde siempre, que buscar amigos que buscar ceniceros. Que nunca te desprecien la cara ni por dos gramos ni por nada. Seas lo que seas, levántate siempre es tu deber de viviente. Miles de pobres juntan mierda para poder vivir, algunos no hacen nada en todo el día. En este mundo que nunca será justo solo rige la ley del viviente. Que no mientan con la tragedia de la muerte, se nos ha dado mucho. Hay que ha sufrido más que aún sigue, pliégate a ellos.
Que te consideren o no basura eso es medida de pocos, si hasta tu madre dude. Quien sabe.
Por eso para mi las iglesias solo tienen muchas veces cementos, pero hay gente que se merece la fe algunas veces, y otras gentes se merecían un infierno pero nunca eterno. Odio la eternidad.

Nunca la entendí, nunca…; no estoy hecho para eso. Solo quiero ser feliz, aunque este loco. Ante todo el buen gusto del heterosexual, disfrute de la mujer todo lo que pueda. Para puritanismo tendrá la vejez, o la perversión total puede llegarle también. Quiero un regalo, una especie de abrazo a mi puta especial que no existe, un último café dulce. Un sueño de cabaret, pero sin la solemnidad de tener un pasado. Mi crónica oscura, un deseo más, uno menos. Tener ya cuarenta años. Mi amor por la cabaretera que me hizo soñar en que tarde-noche del abasto, cuando mis memorias eran incipientes cual mi mugre.
Si quisiera tomarla por el peor de los sentidos solo me quedarían las palabras. Un llanto de mar entero, por esa cabaretera plus ultra que no existe. Un toque semi inocente, es la forma más pura de decadentismo cultural en la era del porno digital. El escritor es un ser valiente pero es tres veces más mezquino que valiente, no tiene respeto humano. Plagia a la biblia depures de todo, este es el primer libro.
Cuanta maquinación, cuanta pena, absurda por sobre todo. No entiendo más que antes. Quiero que vean el impulso de su carne cuando se contornaba en la risa corta. Quiero sean mi yo por un segundo. O sea unos miserables, pero mas huronianos que yo.
Yo iletrado hasta el final, falso surrealista, me falta mi Juliette, o Justine quien sabrá eso.
Todo tópico como este, me muestra sectario y dependiente de mi Circe, señora de los filósofos, emperatriz de caimanes. Una forma de extrañar en las distancias cortas este es el hecho más duro de la historia. No crean en la pena de amor, es aburrida y antiestética sino vean el hambre de ilusión de una vida sin instinto. Ámense hasta que sea necesario, ese es un lema interesante para un tipo como yo.
Yo del tipo del youtube, y del Mac Donald, todo debemos perderle el miedo a nuestra humanidad.
Soy el publicano que es pecador, que no conoce perdón por orgullo. Nunca fui del café, descafeinado.
Cuando se vea en Madrid o en cualquier la estampa de ella, en la ventana, poco se entenderá si hablo de la libertad o de una nalga. O peor de una nalga en libertad.
Es que mi amor es de porcelana, o un poco más vulgar. Es el placer de los dedos, sin ser proxeneta. Sin ser Queen, sin ser nada. Unos jeans la contenían, pero nada más. El celeste de la ropa, que no concebía en ninguna parte. Vómitos, jamás. Soy el buitre vigilante eterno de estas tierras. Si ella es como la heroína o peor, es un instante en el cerebro que se queda en las tripas que trepa por las paredes del cuerpo.
Cuanto de ella ya sido visto, pero solo un segundo al cerrar una puerta basta, para poder cerrar mis neuronas en bordados epilépticos. Unas caras que no se entienden, una búsqueda. Una cuchara llena de mierda, pero que parece por muy poco a chocolate.
Sepan que solo su familia sea la forma que tenga un refugio, no importa si tenes un hermano puto o algo así. No importan las muletas. Busca donde mirar para los costados.
Es acaso yo creo más bien la cara de buscar ser interesante para un tipo que como yo lo ha visto todo. Esa timidez, que no se sabe pero se supone en la inconsciencia es la miel de mis oídos.

Por cuanto a que la rutina mata, no se crean nada de esto, no importa. Tomar un viaje hacia el centro, sudar como un condenado son las delicias de las clases trabajadoras las únicas que saben vivir, las otras disfrutan. Por eso me gusta disfrutar y adiós al sufrimiento cosa de lo más inútil si hay cosas inútiles. Miles de cafés depositados frente al lugar donde escribo, todos sucios todos sin sentido.
Tiendo a buscar eso que esta detrás de los buenos lugares, eso que es lo real. Lo demás es ilusión es que soy una tímida rata que solo quiere los mejores quesos. Buscar esos quesos es a tiempo completo sin descanso, ni feriados, nada. La vida es así, quien se puede esperar otra cosa.
Pienso en la edad oscura esa candombe medieval, del fin de los romanos, mi vida tiene un poco de esa fe, de ese misticismo de ese absurdo por el sí y no el absurdo por el no. Caminar mil veces a Santiago, y otras mil veces más. Todo en pos de seguir creando. Albergar las peores plantas, las peores de todas.
Esta es mi conciencia ya a los cuarenta que no tiene muchas sombras de notoriedad, que no busca interpretar otra cosa, la que nota sinceramente ya como el tiempo pasa.

En esos momentos dejo de pensar en el idealismo y me puedo situar en la vida del hombre medio que nunca podría ejercer por falta de características. Un trabajo estable entre comillas quizás muchas de ella exageración pero acercando a un estado de definitiva rutina. La panza naciente, la falta de estado físico una voluntad diferente, la paciencia del cansancio.
Los hijos que crecen y hacen la suya, quedar un poco en la historia ya tener muchas anécdotas entre otras cosas. Una especie de inercia, la que te quita libertad pero ante todo ver como el tiempo pasa para todos incluido vos. Eso es lo más curioso del asunto ni hablar de las consecuencias del hecho.
Por eso me veo ya como un burgués con mis ideas de burgués con menos ideología que antes. Ya no es lo mismo pensar que se cambia el mundo no se tiene la fuerza, para poner todo patas para arribar una y otra vez. Todo se vuelve un poco conservador, los amigos también se vuelven conservadores. Las cosas tienden a ritualizarse por completo.
Que te vas tragar ya, quizás no conseguiste lo que te iba hacer importante, estas medio lento.
Entendes la prudencia de tus padres pero te das cuenta que es pura fisiología, te das cuenta que hay cosas que parecen ser más morfológicas que lógicas. El camino no es el mismo. No tener esa visión del mundo a los pies. No ser ni demócrata ser apolítico, remilgar de forma de castigo moral a los dominadores.
Ya no tener el mínimo de respeto real, para lo que se considera autoridad, como tampoco ansia de rebeldía.
Me gusta mezclar el tiempo, pensar en todos los lugares al mismo tiempo, no tener contemplaciones de ningún tipo.
La crueldad del que envejece le impone un respeto. Un respeto, que a nadie le importa por lo menos a mí.

Tus manos ya están dobladas, porque todo lo que haces en el fondo tiene una mirada de malignidad de muerte. Conocer lo inevitable en los huesos, en los músculos en los ojos. No es lo mismo que la estéril especulación filosófica sobre el futuro del hombre. Porque la mente ya se sabe que duda sobre el pensamiento que pueda tener todo lo relativiza hasta que todo lo que ocurre por medio de la experiencia le empieza a dar experiencia y no pensamientos. Situaciones completas que llegan a tu cabeza y a la mía. Esas cosas, cuando te ponen contra el piso enseñan.
La oscuridad que se cierne sobre ese pasado que éramos nosotros, por eso se califica a la juventud de lo peor siendo la más fuerte y vivo, la inexistencia del Apocalipsis, la carencia en la duración somos inútiles.
No podría jactarme de entender algo, en eso estamos iguales todos. Solo pienso que cada tanto ya no tengo la fuerza, para sin entender seguir luchando, mi debilidad vital es lo que me hace preguntar.
Cuando pienso que yo, no puedo ver nada de eso que esta deparado para el futuro, solo puedo negar que mis intenciones incluso que mi vejez sea relevante. Volar, y ver volar más lejos. Quédense con el más lejos, es lo que basta para entender que la vida siempre puede más que nosotros.
Cuando vi esto, en vez de sentir nausea vi como el budista la perfección de cada flor, por que cada es solo la propagación de la belleza por el mundo nada más. No hay piedad ni en la belleza.
De una sabiduría proverbial de un viaje, de una estadía lejana. Estas solo en las ciudades, estas simplemente solo en la as ciudades. Eres lento solo porque nada se detiene. Lo mejor de la vida te importa más de cómo mierda esta hecho el universo. El animal no se queja de ser animal si no por el hecho de ser calumniado.
Ver los glóbulos y nada más, es el credo de un materialista, es que esta mal eso. Tal vez pero puede que como todo en la vida, sea una de esas cosas, que solo ser mal respondida. Como que sea el amor prestamos de la vida, para que se reinvierta en ella, que la trampa del sexo sea después de todo apasionante.
No obstante a todo esto, sé que abuso de monologo, y que parece didáctico, quizás no lo sea en absoluto. Pero en el fondo es negocio de todos los inútiles y de los vencidos de todas las cosas, calumniar el mundo este es el caso de todo pesimista que se llama profundo, verdadero. Pura queja a la nada, la nada definitivamente lo orina sin piedad, no los quiere.
En cuanto a la vida de la gente, el aburrimiento el dolor, como lo decía el bueno de Schopenhauer, es todo mentira. Quieren la nada, porque nunca fueron aptos realmente para ella, es de corto entendimiento pensar que las cosas, tienen valor por nosotros mismos. Es la mirada lo que les da valor, pese a que los pesimistas se juzguen de algo de valor solo son consecuencia de idealistas que se cansaron poetas malogrados. Hay mucho de olor a podrido en algunas afirmaciones lo que piensen que todo es en vano y no rían que ridículos, en fin. Basura con la que se debe luchar no por erradicarla sino como acto de caridad, para con ellos que necesitan buscarle el mal a todos. Su moral los hace pesimistas y su falta de voluntad les hace reclamar algo al mundo que nada les debe.
Este es el misterio de la vida, créanme, no hay otra cosa. Que es el pesimismo, hasta los grandes cuando quieren ser pesimistas no pueden confían mucho en si mismos. Los otros los grandes pesimistas son como el síntoma de unos seres, que poco hacen por su vida. Son los verdaderos traidores a su clase. No es que ellos importen y es que por eso, se sienten menos. Unos niños de los más malcriados que se pueda encontrar, entre ellos, el más malcriado de todos hasta ahora en mis descubrimientos que siempre son escasos es Schopenhauer. No me importa saber como llego a ser infeliz de primera ni como se vanagloriaba de esa mísera. Era un amante de la mierda, era más perseguidor que los religiosos, porque ni siquiera le dejaba el azar a Dios. Por eso ante todo un hombre que se ve como una enfermedad antigua de los europeos.
Cuando pienso en esto poco me importa mi vejez, se cree profundo al vencido, solo por intelectual cosa que al final nos muestra el valor de algunas clases de intelectualidad. Porque ser profundo no es por poco, pensar que el mundo es algo frágil y malo. Que somos una cosa, dejada ahí eso fue desde siempre. Sería tonto si la teoría estuviera tan acertada del pesimismo la existencia misma de las cosas. Esto es fundamentalmente por la incapacidad del pesimista de crear algo, es débil y quiere transmitir esa debilidad a todo hasta que lo enferme. Por eso, el mejor de los entendidos en la materia diferencia al hombre trágico de valor excepcional, del hombre pesimista degeneración previa.
Pero esta época, ha dado algún lugar a estos pensamientos que son inconsecuentes. Creo que es parte de la fisiología que degenera, la salud, esta justamente en pensarse vivo y no muerto. Pensarse muerto es imposible, por el hecho de que el límite de la conciencia solo piensa en la posibilidad de la muerte.
Ante todo esto en este espacio nuevamente intermedio escribo la edad oscura. Siempre habrá gente que la vida es un trámite ante ellos, ni la lastima los redime. Porque ellos, creen y necesitan de la redención. Otra caso fenomenal de lo que digo es del criminal que continúa, y continúa con la misma saña pese a sus miserias. Pero eso no es caso de un pesimista, el quiere que el mundo lo aplaste no entiende bien su papel, quiere que otro se lo dé. Por eso, cuando busca en vano alguna muestra de algo, en las demás parte se entiende que busca en el todo.
Porque el todo no le dice nada, por el simple hecho de la inmanencia del valor de las cosas.
Malentender es la especialidad de la gente por los demás no están en ningún momento exonerado de nada. Morir nunca tendría que haber sido un hecho más de problemática individual, es preciso que no nos apiademos tanto de nosotros, para poder estar mejor.

Por eso pese a que ya este mucho más viejo y mucho más débil aunque estas palabras siempre sean de orden relativo, pienso que lo mejor, es no darme tiempo demás. Esos permisos que se saben dar aquellos que conocen, pero que temen conocer más. Siempre hay un limite, tener miedo al límite es una de la formas de vivir, es más pleno y no más feliz, el hombre que se pese a todo busca superarlo. No es idealismo, para la cabezas de las juventudes, que mejor ser idealista muchas veces porque se tiene alguna utilidad más que la de pulular el mundo de la forma en la que se suele hacer muchas veces en nombres de quien sabe que verdad. Obsoletas cosas, obsoletas todas, pueriles, justificaciones si tiene que haber destrucción que la haya después de todo en un pensamiento tan alegre como Schopenhauer, esta bien merecida.
Digo yo que es casi principio de la castración ese postulado y poco me importa lo demás no pienso dar cabida, en un lugar que clama por lo mejor a la decadencia de todos hasta incluso de uno mismo.
En eso hay que ser inflexibles, porque sin voluntad no se va lejos, se deja todo a los otros. Cuando esto pasa, se da uno cuenta que el mundo no es regido por pesimistas. Primer secreto, el que desprecia el mundo no se lo merece, por consiguiente se va autoexcluyendo si este es sacrificio voluntario que lo haga. Para mí, no es más que la facilidad, son de otra biología son menos prósperos, solo saben en ese sentido justificarse.

Tome en este sentido, la narración como verá fragmentaria, es así por el simple hecho de la posibilidad, en cuanto al hecho de la vitalidad. No será un destino no es ningún destino no lleva ninguna parte se aleja de la coherencia, porque no reclama para sí la excelencia porque no le importa es como la fruta podrida le da valor a la fruta buena, le hace contraste.
Hasta en ese punto, podemos discutir, pero no es necesario. Me voy a ir por esa puerta, si esa que estas viendo. La azul, me voy. Te llamo algún día.
Le dejo para que tengan en cuenta los recuerdos de un parque, de un banco verde plaza, destrozado por el uso indebido. Para que lo piensan, lo único bueno que tenía el árbol, estaba salvado por la circunstancia que le próxima.

Adiós-.